La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró un incremento en volumen negociado así como en transacciones, en un contexto de alta volatilidad por las tensiones comerciales.

“La BMV desempeña un papel fundamental al mantener un mercado ordenado, facilitar el descubrimiento de precios y promover la liquidez, factores esenciales para el buen funcionamiento del sistema financiero mexicano”, dijo la institución en un comunicado.

Detalló que al cierre de marzo de 2025, el volumen negociado en el mercado de capitales de la BMV fue de 17 mil 323 millones de pesos, es decir, un incremento de 19% respecto al mismo periodo del año previo, cuando se registraron 14 mil 556 millones de pesos.

Mientras que, el número de transacciones creció 10% y el volumen operado aumentó 2% en el mismo periodo.

El mercado local tuvo un crecimiento de 6% en el volumen negociado y el mercado global registró un incremento de 42%.

En cuanto a la operación en el Mercado de Derivados, en marzo de 2025 se negoció un promedio diario de 34 mil 192 Contratos de Futuros sobre divisas.

Con respecto a los Contratos de Futuros de acciones, el promedio diario operado fue 8 mil 914, registrando un incremento de 201% respecto al mismo periodo del año anterior.

En el caso de los Swaps de TIIE (28 y Fondeo) alcanzaron un nivel de 30 mil 164 contratos, un incremento de 34% respecto al mismo periodo del año pasado.

Lo anterior es un reflejo de la necesidad de los inversionistas por ampliar su cobertura y minimizar su exposición al riesgo. 

Por su parte, al cierre de marzo de 2025 el valor total de los activos bajo custodia fue 40 mil 938 billones de pesos, 10% superior a lo registrado al mismo periodo de 2024.

Mientras que los activos bajo custodia en el mercado local ascendieron a 38 mil 588 billones de pesos y de 2 mil 350 billones de pesos en el mercado global, es decir, 10% y 38% de crecimiento respectivamente, en comparación al cierre de marzo de 2024.

La BMV explicó que el incremento significativo en el número de operaciones y el volumen negociado, tanto en el mercado de capitales como de derivados, es consistente con la actividad reciente de los mercados globales.

Lo que muestra las necesidades de los inversionistas para contar con mercados líquidos y con instrumentos de cobertura que les permitan afrontar de mejor manera la volatilidad.

 

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