Por Enrique Hernández
Uno de cada tres pares de pantalones vendidos en Estados Unidos se fabrica en México, pero esa escena económica puede desaparecer si continúan vigentes los aranceles ordenados por Donald Trump a las exportaciones mexicanas y canadienses.
Llegar a ese nivel producción de pantalones no fue obra de la casualidad ni tampoco de suerte, sino fue gracias al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que catapultó a Torreón como la fábrica de pantalones vaqueros y convirtió a México en el maquilador de marcas de ropa de lujo.
“México se convirtió en un actor de primer orden entre los exportadores mundiales de textiles y prendas de vestir durante la segunda mitad de la década de 1990”, revela la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
En 1991, México era el séptimo mayor exportador de ropa a los Estados Unidos: “A finales de la década, México había desplazado a China y ocupaba el primer puesto en el mercado estadounidense”, señala la investigación realizada por el consultor, Gary Gereffi para la Cepal.
Agrega que el valor de las exportaciones mexicanas de ropa se multiplicó por más de siete, pasando de mil 200 millones de dólares en 1990 a 8 mil 800 millones en 1999. Pero la aparición de China del mapa mundial sacó de esos lugares a México. Y lo fue relegando.
Hoy México es el cuarto mayor exportador de textiles y el sexto mayor exportador de prendas de vestir a los Estados Unidos, según la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex).
Aún y con la competencia de China, uno de cada tres pares de pantalones vendidos en los Estados Unidos se fabrica en México, asegura el organismo empresarial.
Aumento en exportaciones
Las exportaciones mexicanas de textiles y prendas de vestir a Estados Unidos aumentaron más de 23.55 por ciento, aún y con las amenazas arancelarias de Donald Trump.
Para 2024 se proyecta que las exportaciones textiles mexicanas alcancen los 9 mil millones de dólares a Estados Unidos, estima el organismo empresarial.
Los fabricantes de textil y prendas de vestir vendieron 7 mil 284 millones de dólares en 2023, año en que la industria mexicana comenzó a denunciar la invasión de las empresas chinas Temu y Shein.
Torreón fue la fábrica de pantalones vaqueros de Estados Unidos
“Los pantalones vaqueros de mezclilla fueron el principal artículo del repertorio de exportación de prendas de vestir de México, representando el 34% de las exportaciones de prendas de vestir de México a los Estados Unidos en 1999”, dice la investigación de Gary Gereffi para la Cepal.
Por esos años, la ciudad de Torreón, en Coahuila, superó a El Paso, Texas, como principal agrupación exportadora de pantalones vaqueros del mundo, añade.
La transformación de Torreón fue producto de un cambio en la estructura de la industria mexicana de confecciones.
México “pasó de depender de las plantas de ensamblaje en zona franca en el sector de la maquila, que floreció a lo largo de la frontera durante los años ochenta y principios de los noventa del siglo pasado, al auge de proveedores de confecciones de paquete completo que surgieron tras la aprobación del TLCAN en 1994.
En 1993, los principales clientes estadounidenses de los pantalones vaqueros de mezclilla hechos en Torreón eran cuatro grandes fabricantes: Levi Strauss, Wrangler, Farah y Sun Apparel.
En el año 2000, a estas empresas se unieron las principales cadenas minoristas de los Estados Unidos (JCPenney, Sears, Kmart, Wal-Mart y Target), los dos principales minoristas de ropa especializada (GAP y Limited) y los vendedores de una amplia gama de marcas de moda (por ejemplo, Liz Claiborne, Donna Karan, Tommy Hilfiger, Calvin Klein y Polo/Ralph Lauren.
Las acciones de la empresa de ropa GAP han tenido una caída de 8.19 por ciento desde enero al 7 de marzo de 2025, según ActivTrader, la plataforma de trading de ActivTrades.
Los títulos del fabricante de ropa cotizaron en 22.17 dólares el 7 de marzo de 2025 frente a los 24.150 dólares del 2 de enero de este año.
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