Los vehículos híbridos y eléctricos representan un desafío único para la industria del blindaje, pues se enfrentan a la tarea de desarrollar soluciones de protección efectivas con materiales más ligeros a fin de no dañar el desempeño del coche.
De acuerdo con datos del Inegi, la venta de vehículos híbridos y eléctricos registró un aumento notable al inicio de 2024, cuando se adquirieron 7 mil 442 unidades, lo que significó 75% más que el año anterior, cuando la comercialización fue de 4 mil 263 carros.
Omar Lara, presidente de la Comisión de Blindaje Automotriz, del Consejo Nacional de la Industria del Blindaje (CNB), explicó que la complejidad para blindar un auto hibrido o eléctrico radica en que los materiales que se usen no comprometan la eficiencia y el rendimiento de los automóviles.
“El retos se da porque estos autos no tienen las características a las que estamos acostumbrados, por lo que desde hace algunos años estamos desarrollando materiales más ligeros, resistentes y certificados que puedan ofrecer un nivel óptimo de seguridad sin agregar demasiado peso y sin comprometer su desempeño”
Características
Cabe recordar que los automóviles híbridos cuentan con una tecnología de gestión inteligente de potencia y propulsión, lo que significa que el trabajo del motor dependerá de las necesidades del usuario.
Es decir, si se requiere circular a la potencia máxima, el motor de gasolina se encargará de mover el vehículo.
En cambio, si deseas circular a una velocidad media, el motor eléctrico podrá hacer esta función empleando energía de reserva.
Todos estos elementos deben ser muy bien cuidados, por eso, además de además de trabajar en soluciones tecnológicas, los blindadores realizan inversiones en la capacitación de los técnicos porque se debe tener cuidado especial en los sistemas eléctricos de los vehículos.
El 80% de las solicitudes de blindaje en autos corresponde al nivel 3 (comercial) que protege contra asaltos urbanos, mientras que el 20% restante se reparte en los niveles 4 y 5 (comercial) que son contra secuestro.
Chihuahua, Ciudad de México, Estado de México, Jalisco, Nuevo León, Sinaloa, Veracruz y Zacatecas son las entidades donde se concentra la mayor parte de solicitudes de compra de vehículos blindados.
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