Si alguna vez has rentado, te parecerá familiar el término depósito, hoy hablaremos un poco más a fondo de lo que esto significa, acompáñanos.
Al rentar una propiedad es una práctica común que los dueños soliciten, además del contrato y el pago mensual, un monto que se conoce como depósito de renta. Éste es una garantía para el dueño en caso de que exista algún inconveniente futuro entre los involucrados.
¿Qué es un depósito de renta?
El portal de clasificados online de real estate en México, Inmuebles21, explica que el depósito de renta es el dinero que el inquilino le entrega al dueño del inmueble al momento de firmar el contrato de arrendamiento. Es importante señalar que esta cantidad debe pagarse en su totalidad para tener el derecho a habitar la casa o departamento en cuestión.
Por lo general, dicho depósito equivale a uno o dos meses de renta y sirve como una garantía para el propietario en caso de que el arrendatario incumpla con los compromisos previamente pactados en el documento.
El monto se devuelve al inquilino al finalizar el contrato; siempre y cuando esto haya sido aclarado en el mismo documento. Sin embargo, hay casos en los que no se devuelve como los siguientes:
- Cuando hay daños provocados por el uso del inmueble que el propietario no puede cobrar, por ejemplo: desprendimiento de pintura, pisos, duela o alfombras dañadas.
- Si hay desperfectos provocados por el inquilino de manera imprudente, por ejemplo: ventanas, pisos y puertas rotas, afectaciones a la estructura del inmueble, suciedad excesiva que dañe el inmueble, entre otras.
- Si se realizaron modificaciones al inmueble sin autorización y esto representa daños o perjuicios al lugar por no ser devuelto como fue entregado originalmente.
- Para pagar retrasos o faltantes en tus cuotas de servicios como agua, luz, mantenimiento, gas, etc
¿Por qué tiene relevancia?
Durante el plazo en que el inquilino habite un inmueble en renta, el pago funciona como un respaldo para el dueño en caso de que existan daños en la propiedad (por uso o descuido), que no se cumplan con las cuotas mensuales o que finalicen la relación de arrendamiento antes de tiempo.
Si se da alguno de los casos antes mencionados, al finalizar el contrato el propietario tiene derecho de retener el depósito o hacer uso de él para reparar los daños o compensar la morosidad de su residente temporal.
“Por lo general, en el contrato de arrendamiento se estipula el estado en que se entregó la propiedad y las condiciones en las que se encuentra al momento de habitarlo. Toma en cuenta que si haces modificaciones, aunque creas que son para mejora, sin autorización de tu casero, esto podría ser motivo para descuentos en el reembolso de tu depósito de renta”, comenta, Karla González Montoya, Marketing Manager B2C de Inmuebles24.
Pon atención en las cláusulas de tu contrato para saber las conficiones de la devolución
En la mayoría de los casos, esta cantidad te será entregada por completo en el plazo de 30 días una vez que el contrato de arrendamiento quede invalidado y ya no habites la propiedad. Pero para asegurarte de que te entreguen el depósito pon especial atención en las cláusulas de tu contrato que condicionen la devolución de tu pago.
Recuerda que en tu contrato de arrendamiento debes revisar que el documento contenga:
- Plazo del alquiler
- Precio
- Periodo
- Dirección del inmueble
- Nombres de ambas partes (arrendador y arrendatario)
- Cláusulas
- Fecha de término del contrato
- Cantidad abonada como garantía
- Depósitos
- Gastos
- Derechos
- Obligaciones del inquilino y del propietario
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