¿Sabías que en México el trigo es el tercer cereal más cultivado después del maíz y el arroz y es el segundo más consumido, con un promedio de 61.4 kilogramos per cápita al año?
Por ello, el trigo no sólo es importante para la seguridad alimentaria de México, sino del mundo, aseguró Víctor Villalobos Arámbula, titular de Agricultura, al participar en la conferencia Nuestra riqueza: El trigo mexicano y sus derivados.
Demanda del trigo, en aumento
Ante el aumento de la demanda nacional de trigo, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural ha puesto en marcha programas y acciones para incrementar la producción del cereal y mejorar las condiciones de comercialización de más de 90 mil productores que cultivan alrededor de 600 mil hectáreas en 24 entidades, para que sigan viendo en este grano una opción rentable.
Asumimos el compromiso de acompañar a los productores, principalmente a los de pequeña escala, para mejorar la producción, productividad y todos los eslabones de la cadena productiva, afirmó Villalobos Arámbula.
Programas prioritarios para apoyar a los productores
Señaló que los programas prioritarios: Producción para el Bienestar, Fertilizantes para el Bienestar y Precios de Garantía incluyen apoyos a los productores de este grano, aunado al manejo fitosanitario que previene y atiende las principales plagas y enfermedades que afectan la producción del trigo.
De igual forma, resaltó, el Proyecto Estratégico de Desarrollo Agrícola para el Pueblo Yaqui ha permitido recuperar la autonomía productiva de 3 mil hectáreas de trigo, con apoyos al costo de producción, maquinaria e implementos agrícolas, cobertizos para el resguardo de maquinaria y acompañamiento técnico del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), entre otros.
Consumo nacional del trigo
Se estima que para 2030 el consumo nacional de trigo harinero aumente de seis a siete millones de toneladas, lo que implica un alza acumulada de 16.5% y para asegurar su abasto y mantener un ordenamiento productivo y de mercados, se apoya al sector con diferentes acciones desde el Gobierno de México, anotó.
Ante los representantes de la cadena productiva, investigadores y funcionarios, Villalobos Arámbula expuso que la producción de trigo cristalino cerró el año pasado en 2 millones 86 mil toneladas y la de trigo panificable en un millón 525 mil toneladas.
Los principales estados productores fueron: Sonora, con dos millones 018 mil toneladas; Guanajuato, 387 mil 805 toneladas; Sinaloa, 287 mil 715 toneladas; Baja California, 258 mil 600 toneladas; Baja California Sur, 256 mil 785 toneladas, y Jalisco, 146 mil 054 toneladas.
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