La falta de testamentos es una de las problemáticas acentuada con la pandemia, ya que de acuerdo con el estudio Emergencia Sanitaria por Covid-19: Derecho Privado, publicado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, en la Ciudad de México tan sólo una de cada 20 personas cuenta con uno. Lo que significa que vender una casa heredada puede ser toda una osadía.

El primer paso en la venta de una casa de este tipo es verificar ante el Registro Nacional de Avisos de Testamento (RENAT) si existe un documento en el cual el fallecido haya heredado sus bienes a sus familiares.

De acuerdo con Vivanuncios, sitio de anuncios clasificados en línea, si la vivienda se encuentra intestada, o si el testamento es impugnado, los familiares directos del antiguo propietario podrán acceder al inmueble a través de un juicio de sucesión testamentaria.

En caso de que existan varios beneficiarios debe definirse si la casa se va a vender, arrendar o si uno de los herederos la habitará.

Esta decisión debe tomarse en conjunto entre todos los individuos con derecho sobre la propiedad, lo que generalmente incluye hijos, hermanos y cónyuges del fallecido.

 

Debes ponerte de acuerdo para la venta

 

Si alguno de los herederos se inclina por la venta de la casa heredada, mientras que el resto quiere conservarla, una práctica común es comprar el porcentaje correspondiente del inmueble a la persona interesada en vender.

Si todos se ponen de acuerdo, considera que para obtener un mejor precio al vender una casa heredada, es recomendable al menos realizar una limpieza general y retocar la pintura del inmueble o incluso remodelarlo.

Toma en cuenta que si la vivienda estuvo deshabitada por un plazo prolongado de tiempo o si los propietarios anteriores eran de edad avanzada, es posible que ésta tenga deudas acumuladas por el pago de los servicios o de impuestos.

 

Ojo con las hipotecas

Otra deuda significativa que puede estar ligada a la vivienda es una hipoteca.

Generalmente, las entidades financieras establecen un plazo máximo de 180 días naturales para recibir la notificación del fallecimiento del titular del crédito, y cubrir el saldo con el seguro de vida del préstamo.

En el caso de las hipotecas abiertas, los herederos deben cubrir el saldo del financiamiento, en caso de aceptar la herencia.

Además, de manera similar, el responsable legal, aval o albacea también se hace responsable de liquidar el crédito.

Para asignar un precio adecuado al inmueble, los herederos deben contratar un avalúo comercial o los servicios de un agente inmobiliario.

 

 

Lee también:

Al alza precio promedio de vivienda nueva 

Aún es buen momento para comprar casa

 

 

¿Te sirvió esta información? Escríbenos a [email protected]

Cuéntanos que temas te interesa leer.

Y no olvides seguirnos en nuestras redes sociales en Twitter, Instagram, Facebook